EL EVANGELIO SEGÚN SAN MALAQUÍAS

Gracias a los muchachos de la National Geographic, anoche me enteré que la vida y obra del buen Jesús (Jecho, para los compañeros de carrete) fue relatada no sólo en cuatro evangelios, sino que en más de una treintena de relatos escritos por sus primeros FANÁTICOS RELIGIOSOS (molesta la hueaíta, nocierto? eso para que aprendan a respetar a los musulmanes), entre ellos el vilipendiado Judas Iscariote.

Según su versión de los hechos, no fue que él traicionara al Dios hecho Hombre por 30 monedas de plata, sino que estaba haciendo una paleteá para que el Occiso pudiera cumplir con Su misión y reunirse con Su padre, algo así como una eutanasia celestial. Obviamente, el pillín tampoco menciona si recibió o no las 30 monedas, contribuyendo de paso a la fama de avaros que tienen los judíos, pero eso es otra historia.

La cosa es que luego de pedir disculpas mentales por tantas y tantas veces que participé en la Quema del Judas (tradición casi exclusivamente porteña, creo), me quedé pensando en que en realidad, si los primeros cristianos tenían que reunirse en catacumbas, arrancar de los romanos, morir en el circo, sufrir las mismas burlas que ahora sufren los krishnas que se suben a la micro a vender incienso, usar chalailas a perpetuidad y otra serie de calamidades, lo menos que podían hacer era inventar su propio rollo (literalmente, como los rollos del Mar Muerto) sobre cómo había vivido, muerto y resucitado el Hijo regalón de Jehová.

Y sin más, aduciendo que fui bautizado; que viví en el cerro La Cruz; que hice mi Primera Comunión; que participé en las Comunidades de Vida Cristiana (CVX); que trabajé en el Encuentro Continental de Jóvenes y que estudié en colegios y universidades católicas, me siento con los suficientes pergaminos (qué palabra más apropiada, Dios mío! ) para escribir mi propio Evangelio, es decir, el Evangelio según San Malaquías.

Pero ligerito me dio una paja atroz, además que este muchacho Jesús, bromas aparte -y me sé muchas sobre Él, la Verdad (y valga la redundancia) – me cae muy bien, es especial las bienaventuranzas. Así que en lugar de reescribir la Biblia, opté por revisar y corregir los 10 mandamientos. Tomen asiento hijos míos, que ahí les van.

VERSIÓN RENOVADA Y REMASTERIZADA DE LOS 10 MANDAMIENTOS:

1.- Amarás a DIOS sobre todas las cosas.
Amarás a Dios JUNTO con todas las cosas, total Él está en todas partes.

2.- No tomarás el nombre de DIOS en vano.
No tomarás el nombre de NADIE en vano, total para eso tienes el tuyo, sino te gusta, búscate un buen pseudónimo, como hicieron Neftalí y Lucila.

3.- Santificarás las fiestas.
Este se mantiene: las fiestas son sagradas, especialmente las despedidas de soltero, el asado pa los partidos de Chile y el Año Nuevo bailando el Galeón Español.

4.- Honrarás a tu padre y a tu madre.
Honrar, lo que se dice honrar, no… pero aguanten lo que puedan. Mal que mal son los viejos de uno. Ahora en cuanto a los padres y madres ajenos, son libres de aplicar mandamientos 6 y 9.

5.- No matarás.
Para no ponerse talibanes, he aquí una lista de cosas que sí pueden matar: Las ganas, el tiempo, las botellas (tomarse el conchito), las cajetillas, las pulgas, y por supuesto, matar la gallina.

6.- No cometerás actos impuros.
Mmmm, este queda así: “No cometerás actos impuros… sin el consentimiento de la o las prójimas o prójimos; animales y/o aparatos afines”.

7.- No hurtarás.
Pucha, éste de no robar es difícil… miren que me pueden aplicar la Ley de Seguridad Interior del Estado por andar llamando a la Anarquía, pero convengamos en que se autoriza robar si no se va a perjudicar a nadie y siendo estrictamente necesario, por hambre, o sed, por ejemplo (en especial sed).

8.- No dirás falsos testimonios ni mentirás.
Aquí vamos a dejar pasar las mentirillas blancas, y consagrar mediante plebiscito universal aquellas mentiras que deben ser perdonadas eternamente: “voy y vuelvo”, “yo no me fijo en lo físico”, “no eres tú, soy yo”, “mañana te lo devuelvo”, “es primera vez que me pasa”, “nunca antes había hecho algo así”, “paga tú que no tengo sencillo”, y algunas otras más vulgares de las que sólo deslizaré “yo te aviso”.

9.- No consentirás pensamientos ni deseos impuros.Éste queda absolutamente derogado, son libres de pensar y desear lo que quieran, en especial si están deseando los mandamientos 3 y 6, jeje.

10.- No codiciarás los bienes ajenos:
A ver, este también queda derogado, total de todos modos era letra muerta. Además, no hay nada malo en codiciar, por ejemplo, la plata, la esposa o la hija de tu vecino, el problema está en poner las manos, ya sea en la plata, la esposa o la hija, porque ahí sí, más vale que te pillen confesado.

Iros en paz, mis queridas almas descarriadas.

M.